¿Por qué todo fumador alguna vez se ha equivocado y ha encendido un cigarro al revés?¿Es un trámite por el que hay que pasar?
¿Por qué nos da tanta vergüenza quedarnos en calcetines cuando vamos a una zapatería?¿Por qué en cuanto nos traen el calzado que hemos pedido nos lo ponemos a toda leche?
¿Por qué todos hemos intentado alguna vez tocarnos la nariz con la lengua y nos da rabia si no lo conseguimos?
¿Por qué hay tanta gente que cuando como un helado de cucurucho, a la mitad, muerden el piquito de abajo? ¡Si saben que por ahí les va a chorrear!
¿Por qué todo el mundo, en algún momento de su vida, ha ido a mirar un escaparate, no ha calculado las distancias y se ha estampado con el cristal?
¿Por qué nos sorprende tanto que queme la arena de la playa, que nos ponemos a correr como locos gritando: «¡Quema, quema!»?? Claro que quema, ¿qué esperabas?
¿Por qué nos hace tanta gracia que se nos quede la marca del reloj cuando nos ponemos morenos en verano, que en cuanto lo vemos se lo decimos al de al lado? «Mira, se me ha quedado la marca, parece que llevo reloj, pero no»
¿Por qué nos da tanto asco que los cerdos se revuelquen por el lodo y luego nosotros vamos a un balneario y nos metemos en una bañera llena de barro?
¿Por qué cuando un aparato eléctrico no funciona no se nos ocurre otra cosa que apretar con más fuerza el botón de encendido?
¿Por qué nos gusta tanto poner caras estúpidas en el espejo del ascensor?
¿Por qué cuando alguien se va a poner gotitas en los ojos abre la boca de esa manera tan extraña? ¡Es colirio, no tequila!
¿Por qué cuando cogemos una caja de medicamentos por muchas vueltas que le demos, siempre la abrimos por el lado que no es y aparece el prospecto ahí doblado?
¿Por qué cuando vas de viaje te sientes culpable si no visitas los museos?
¿Por qué cuando nos enfadamos nos cruzamos de brazos?¿Qué ganamos con ello?
¿Y por qué elegimos siempre las bodas para dar a conocer a nuestros padres que fumamos?