Remedio casero para enfriar esas cervezas recién traídas del super y que te apetecería tomarte fresquitas.
En una ensaladera metes las latas de cerveza, las cubres con hielo, sal y un chorro de agua y las metes al congelador. Magia, 3 minutos después estarán fresquitas y listas para tomar.
El motivo es químico. El agua y la sal para mezclarse necesitan calor (reacción endotérmica) y el hielo para deshacerse también necesita calor. Así que repasemos… estamos en el congelador con una ensaladera llena de hielo, agua, sal y unas cervezas calientes…está claro que el calor lo ponen las cervezas y al ceder calor se enfrían.
Todo esto esto fuera del congelador, no serviría para nada ya que el calor para las reacciones lo cedería el ambiente y tendríamos cerveza caliente y una ensaladera llena de sal aguada.