1. Dormir con animales te relaja
Suena raro, en especial si duermes con un caballo, pero es cierto, aun cuando los médicos pondrán el grito en el cielo, por eso de las infecciones, y todo eso, pero sin embargo, un estudio de la Universidad de Pittsburgh afirma que dormir con una mascota es relajante y aporta estabilidad emocional.
2. Durmiendo no somos románticos
Uno duerme con su pareja, y la abraza, porque la quiere, despertando ambos de la misma forma…demasiado romántico ¿no crees?…y muy inusual, pues según un estudio realizado por la Universidad de Melbourne, 2 de cada 10 parejas, suele dormir abrazaditos…
3. Dime cuanto te tiempo te tomas en dormirte…y te diré de que sufres.
Lo recomendable es tardar entre diez y quince minutos en conciliar el sueño, ahora si te demoras menos de cinco minutos en dormir, puede ser síntoma de que sufres de somnolencia diurna.
4. Freddy Krueger tenía razón.
En las películas de «Pesadilla en la calle Elm», las victimas que sufrían en sueños, por Freddy, se movían en sueños, representando en ello, sus luchas contra tal enemigo pesadillesco. Ha quedado demostrado que muchos movimientos que realizamos durante la fase REM del sueño(como el acto de taparse con la almohada) responden a acciones idénticas que transcurren en nuestros sueños.
5. Una lucha en la cama
Inconscientemente quienes duermen acompañados en una misma cama, durante la noche, pegan patadas, codazos, empujones, y hasta combos, por recobrar su lugar en el lecho, para un mejor dormir…
Quizás por tal motivo, los matrimonios de la nobleza británica acostumbraban a dormir en camas separadas