Si es que con esta canción entran ganas de ir a votar todos tocando palmas y diciendo «ey, ey, ey», que cachonda la canción, haber cuando sacan la de Rajoy, la verdad es que tiene un estribillo pegadizo la jodia. Lo curioso de todo es que el jubilado en cuestión no puede votar porque es ciudadano frances, lo que pasa es que lleva 21 años viviendo en España.