Protagonismo de la calabaza en la noche de Halloween
La calabaza hueca, con una vela dentro, en la noche de brujas, como también es conocida la noche de Haloween, es el elemento decorativo que está presente en casi todas las casas para crear un ambiente tenebroso, del que participan tanto mayores como pequeños, pero ¿de dónde surge la tradición de la calabaza en Halloween?
Origen de la calabaza de Halloween
La leyenda de la calabaza de Halloween tiene un origen irlandés. Jack, un borrachín irlandés había vivido una vida despreocupada y llena de golfearías y juergas vendió su alma al diablo por una moneda para poder beber, pero una vez tuvo que pagar su deuda al diablo, Jack le engañó y pudo obtener el perdón a su deuda. Una vez que Jack murió, no se le permitió entrar en el cielo, pero tampoco en el infierno, ya que el diablo no podía tomar su alma. Desde entonces vaga entre ambos mundos con un repollo hueco (según versiones hablan de un nabo) con una vela dentro.
Traslado de la tradición a Estados Unidos
Con la llegada de los irlandeses a Estados Unidos, también llegaron sus tradiciones, y como no la de Jack, pero en Estados Unidos sufrió una transformación: cambiaron el repollo por calabazas ya que abundaban más en esa tierra y eran más fáciles de ahuecar dándoles el nombre de Jack o lantern.
¿Por qué se celebra Halloween la noche del 31 de octubre?
Las brujas se reunían dos veces al año: el 30 de abril (víspera de mayo) y el 31 de octubre (víspera de “Todos los Santos”). Las brujas acudían llamadas por el diablo, llegaban en sus escobas para participar en los aquelarres y aprender nuevos hechizos.
Según esa misma leyenda, si esa noche te pones la ropa al revés y caminas hacía atrás, se te aprecerá una bruja. ¿Quieres intentarlo?