Había una vez una niña que era como las otras niñas y que además tenía la particularidad de que ella era fan, muy fan de Jack Sparrow, o lo que es lo mismo de Johnny Depp. La niña se llama Beatrice Delap y como buena fan, un buen día decidió escribirle una carta a su héroe pidiendo ayuda para un problemilla que tenía en su escuela. Esto es lo que le puso en la carta.
«Capitán Jack Sparrow, en la escuela Meridian Primary, somos un montón de jóvenes piratas y tenemos problemas en hacer un motín contra los maestros, y nos encantaría que vinieras a ayudarnos. Beatrice Delap, nueve años, colega pirata. PD: ¡tenemos un gran suministro de ron! – Beatrice Delap «
Johnny Depp, al recibir esa carta se puso su indumentaria de Jack Sparrow y se presentó en persona en el colegio Meridian Primary donde cuentan que todos los niños, nada más verlo, gritaron enloquecidos de emoción por poder conocer a su héroe en persona. El mismísimo Sparrow estaba ante sus ojos.
Beatrice contó, “Me dio un abrazo y me dijo: tal vez no debamos hacer el motín hoy, por que la policía está afuera monitoreandome.”
Lo mejor de la historia es que Johnny no iba con periodistas ni fotógrafos, fue al colegio sólo por su fan, por los niños, por hacer feliz a los demás, porque a veces esto cuesta muy poquito. Qué grande Johnny.