Aunque cada vez hay menos casos, siguen dándose situaciones que alertan de los problemas que padecen las personas impedidas en su día a día. El pasado domingo un joven minusválido acudió a la estación de Renfe de Murcia para coger un tren dirección Madrid. Allí, el personal del servicio de asistencia ‘RENFE Atendo’ le ayudó a subir al espacio entre vagones, pero su silla de ruedas no cabía por el pasillo y tuvo que realizar el trayecto completo en la estancia destinada a las subidas y bajadas de los viajeros. El pasajero, como el resto, había pagado su asiento, sin embargo se vio obligado a quedarse allí apartado durante horas. “Por 30 pavos más, puedes ir en preferente”, se le oyó decir a un empleado que se acercó para ver si necesitaba algo.
Puestos en contacto con RENFE, un portavoz de la delegación de Murcia ha confirmado a El Confidencial que la persona sobre la que gira el caso viajó en esa ubicación debido a que “en la línea Cartagena-Murcia-Madrid de momento no hay una Plaza de Movilidad Reducida (PMR), pero nos sorprende que alguien le dijera que podía pagar 30 euros más para ir en preferente porque si hubiera habido una PMR en preferente, el cliente minusválido hubiera viajado en ella a precio de turista. No es habitual que se den casos como éste. El tren está homologado pero hay sillas que no”.
Vía: elconfidencial